Infantas y Reinas

La princesa Luisa fue el primer miembro de la realeza británica en tener un matrimonio desigual desde el siglo XVI. Casó con un noble con el que no tuvo hijos, pero su vida contiene también un hijo secreto y varios supuestos amantes. Hoy la conocemos.

Catalina de la Cerda fue la esposa del poderoso Duque de Lerma, valido de Felipe III. Siempre a la sombra de su marido, éste la colocó como camarera mayor de la Reina. En el episodio de hoy os hablamos de su vida y de su peculiar entierro, entre otras cosas.

Hay una idea preconcebida de que las damas que vivían en el Alcázar lo hacían en un régimen casi monacal, pero el fenómeno del galanteo del que hablamos hoy echa por tierra algunos de esos mitos. Os contamos qué era el galanteo, su origen y los numerosísimos problemas que generó a los distintos monarcas así como de qué manera los solucionaron.

Hoy hablamos de una mujer muy desconocida que fue reina consorte de España durante la Guerra de la Sucesión. Isabel Cristina de Brunswick fue la esposa de Carlos VI, pretendiente austríaco a la Corona de España tras la muerte de Carlos II. Él mismo se tituló rey de España, con el nombre de Carlos III, y por tanto Isabel se convirtió en reina al casarse con él. Mientras tanto, en Madrid coexistían con ellos otros dos reyes: Felipe V y María Luisa Gabriela de Saboya. Se casaron en la ciudad de Barcelona y allí vivieron unos años sin tener hijos, aunque posteriormente fueron los padres de la famosa emperatriz María Teresa. Sin embargo, los acontecimientos históricos inesperados, tan comunes en la dinastía de los Habsburgo, cambiaron el destino de esta pareja.

Luisa de Guzmán fue una noble andaluza que se casó con el duque de Braganza, sin sospechar que su vida daría un giro y acabaría convertida nada más y nada menos que en Reina de Portugal. Hoy hablamos de su peculiar historia.

Luis XIV es conocido por sus múltiples relaciones extramatrimoniales, de las que llegaron a nacer 16 hijos. En el episodio de hoy hablamos de las hijas que tuvo el Rey Sol fuera del matrimonio. Solamente fueron cuatro las que llegaron a la edad adulta, y, con la excepción de una, tienen vidas muy similares y matrimonios ventajosos concertados por su padre. Hoy en Infantas y Reinas vamos a conocerlas.

María fue una princesa polaca que acabó como reina consorte de Francia, tras salir elegida en una lista de 100 candidatas. Fue abuela de tres reyes de Francia y además la reina consorte que más tiempo estuvo en el trono. Aunque en su momento no fue demasiado bien recibida y no tuvo un matrimonio muy feliz, tras su muerte se la consideró una reina modelo incluso para la propia María Antonieta. Hoy hablamos de ella.

Ana de Dinamarca se casó con Jacobo I de Inglaterra y fueron los padres del malogrado Carlos I. Acompañó a su marido durante su reinado en suelo inglés, y sufrió su difícil carácter y su camarilla de favoritos, entre ellos el famoso Villiers. Es una reina poco conocida en España a pesar de haber sido la primera reina Estuardo de Inglaterra. Hoy hablamos de ella.

Carlos V tuvo tres hijas naturales, además de la supuesta hija que se le atribuye con Germana de Foix, su abuelastra. De las tres la más conocida es Margarita de Parma, la única que reconoció. Hoy hablamos de Tadea, una hija desconocida para los historiadores de la que ni siquiera existe un retrato. Nacida en la misma época que Margarita, se crió en un monasterio alejada de su madre y posteriormente fue casada a la fuerza con un noble. Años después intentó ser reconocida por su hermano, Felipe II, sin conseguirlo.

Carlota Joaquina fue muchas cosas a lo largo de su vida. Primera nieta de Carlos III, hermana de Fernando VII, infanta de España, reina de Portugal y suegra (dos veces consecutivas) del famoso Carlos María Isidro. También estuvo a punto de ser suegra de Ludovica de Baviera, y en ese caso nunca hubiera nacido la emperatriz Sissi. Mujer impetuosa y dominante, fue alejada de la Corte por su propio marido tras descubrir que planeaba deponerle. Sus intrigas no acabaron ni siquiera cuando la familia real tuvo que exiliarse a Brasil. En resumen, una vida muy agitada de la que os hablamos hoy.