Sesión doble de Diario de campo

El orgullo interior y Vecindonas «Hoy es noticia que Isabel Moreno (PP), la alcaldesa de Fonfría, pueblo de 29 habitantes, ha propuesto al concejo abierto aplicarse un sueldo de 14.000 euros anuales por una dedicación de diez horas semanales, aunque serán muchas más las que tendrá que invertir para atender las necesidades del municipio. La unanimidad de la asamblea ha votado a favor. Según Heraldo de Aragón, “una fuente vecinal criticó el establecimiento de la remuneración y afirmó que la convocatoria de la asamblea en la que se tomó el acuerdo se hizo con poca publicidad”. En contra de lo que piensa una supuesta mayoría, el trabajo de una alcaldía no tiene fin en un pueblo pequeño. Ahí no hay una corte de personal funcionario para atender a la ciudadanía. Ahí no hay centralitas telefónicas para recoger avisos a todas horas. La referencia es el alcalde, o la alcaldesa, quien tiene la obligación de servir porque se eligió para ello. Y gratis. No es de extrañar que, como escribía esta semana Juanjo Francisco en Diario de Teruel, “todo lo que signifique escapar [de Teruel] supone un éxito sin remisión”, concluyendo que para prosperar hay que trabajar y hacerse fuerte: “Solo así se erradicarán estereotipos que lastran más que las malas políticas o la ausencia de estas en general”.» Como cada domingo, en la contraportada de Diario de Teruel.