Liturgia de las Horas podcast

Completas Domingo de la III semana de Adviento

0:00
7:36
Retroceder 15 segundos
Avanzar 15 segundos

COMPLETAS DOMINGO (SOLEMNIDADES)

(Oración antes del descanso nocturno)


INVOCACIÓN INICIAL

V. Dios mío, ven en mi auxilio

R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.


EXAMEN DE CONCIENCIA

Hermanos, habiendo llegado al final de esta jornada que Dios nos ha concedido, reconozcamos sinceramente nuestros pecados.


V. Señor, ten misericordia de nosotros.
R. Porque hemos pecado contra ti.
V. Muéstranos Señor tu misericordia.
R. Y danos tu salvación.


V. El Señor todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna.

R. Amén.


Himno


“Cuando acabamos el día 

te suplicamos, Señor, 

nos hagas de centinela 

y otorgues tu protección. 


Que te sintamos: contigo 

sueñe nuestro corazón 

para cantar tus loores 

de nuevo al salir el sol. 


Danos vida saludable, 

alienta nuestro calor, 

tu claridad ilumine 

la oscuridad que llegó. 


Dánoslo, Padre piadoso, 

por Jesucristo, el Señor, 

que reina con el Espíritu 

Santo vivificador. Amén.”


Salmo 90 - “Al amparo del Altísimo no temo el espanto nocturno.”



LECTURA BREVE   

Verán el rostro del Señor, y tendrán su nombre en la frente. Y no habrá más noche, y no necesitarán luz de lámpara ni de sol, porque el Señor Dios alumbrará sobre ellos, y reinarán por los siglos de los siglos.


RESPONSORIO BREVE

V. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.

R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.

V. Tú, el Dios leal, nos librarás.

R. Te encomiendo mi espíritu.

V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.


CÁNTICO EVANGÉLICO

Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz.

CÁNTICO DE SIMEÓN       Lc 2, 29-32

Ahora, Señor, según tu promesa,

puedes dejar a tu siervo irse en paz,

porque mis ojos han visto a tu Salvador,

a quien has presentado ante todos los pueblos

luz para alumbrar a las naciones

y gloria de tu pueblo Israel.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.

Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz.


OREMOS

Humildemente te pedimos, Señor, que después de haber celebrado en este día los misterios de la resurrección de tu Hijo, sin temor alguno, descansemos en tu paz, y mañana nos levantemos alegres para cantar nuevamente tus alabanzas. Por Cristo nuestro Señor.



CONCLUSIÓN

V. El Señor todopoderoso nos conceda una noche tranquila y una santa muerte.

R. Amén.


ANTIFONA FINAL DE LA SANTISIMA VIRGEN


Dios te salve,  

Reina y Madre de misericordia, 

vida, dulzura y esperanza nuestra, 

Dios te salve. 


A ti llamamos 

los desterrados hijos de Eva, 

a ti suspiramos, gimiendo y llorando, 

en este valle de lágrimas. 


Ea, pues, Señora, abogada nuestra, 

vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, 

y después de este destierro muéstranos a Jesús, 

fruto bendito de tu vientre. 


Oh clemente, oh piadosa, 

oh dulce Virgen María!  




(704)

Otros episodios de "Liturgia de las Horas"